Luis Enrique quiere solucionar con la mayor celeridad posible el culebrón de Mbappé. El entrenador asturiano no se siente cómodo con esta situación. Respetó la decisión del club de dejarle fuera de la gira que los parisinos están llevando por Japón, pero su deseo es que cuando el PSG regrese a la capital francesa, después de jugar en Corea del Sur el último duelo por Asia ante el Jeonbuk, la situación esté solucionada ya sea con la confirmación de que se marcha, lo más probable en este momento, o con su continuidad garantizada hasta, como mínimo, 2024.
Luis Enrique es plenamente consciente de que esta situación más pronto que tarde afectará al ambiente del vestuario. Y es que, cree que no sería sencillo tener a Mbappé toda la temporada en la grada, tal y como amenaza en estos momentos el PSG si mantiene su idea de quedarse sin renovar. De hecho, el asturiano es muy escéptico con esto e intentaría por todos lo medios que, de quedarse así, pudiese ser uno más del equipo.
También sabe que si el PSG no vende o no le deja contar con Mbappé, es complicado que se refuerce ofensivamente. Y tras la marcha de Messi y las incógnitas que deja Neymar, los parisinos necesitan un referente arriba que tire del carro. Por ello, Luis Enrique cree que de mantenerse en su idea de no renovar, Kylian tendría que ser uno más del equipo.
Además, Luis Enrique está convencido de que decida lo que decida, Mbappé se va a comportar como un profesional y va a ser el líder del equipo. Ya contó OKDIARIO que le sorprendió su actitud en los primeros días en los que trabajaron juntos. De hecho, le dio media hora en el primer amistoso del PSG e hizo un gol.
Por otro lado, Mbappé tiene claro que pase lo que pase se quiere ir del PSG bien y agradecido. No quiere dejar un mal recuerdo entre los aficionados, por ellos, si cumple su contrato, algo que mantiene, lo dará todo por intentar llevar a los franceses a lo más alto. Diferente es la relación que tiene con Nasser Al-Khelaïfi, que en estos momentos está roto y parece imposible que se recupere.